Egresada del Liceo Alemán del Verbo Divino de Los Ángeles, Francisca
Belart ingresó a Ingeniería Forestal en la ciudad de Concepción, sin
embargo la convicción de estudiar la carrera rodeada de bosques en la
Universidad Austral de Chile la llevó a cambiarse de casa de estudios.
Luego de titularse en el año 2006 trabajó en la Empresa Mininco. Hoy
día estudia un doctorado en la Universidad Estatal de Oregón, Estados
Unidos.
¿Por qué decidiste estudiar ingeniería forestal y por qué en la UACh en particular?
Crecí en el campo y siempre supe que quería trabajar en algo que estuviera relacionado con la naturaleza. Desde que me decidí a estudiar Ingeniería Forestal siempre quise que fuera en la UACh, sabía que tenía una excelente Escuela Forestal y estaba en un entorno de bosque mucho más diverso y complejo que en otras partes del país. Sin embargo, al ser de la VIII Región, tuve que considerar que era económicamente más razonable estudiar en Concepción. A pesar de esto y luego de los primeros años, me convencí de que lo que yo realmente quería era estudiar en la UACh, aunque significara un mayor esfuerzo para mí y mi familia. Afortunadamente, ellos me apoyaron. Hasta el día de hoy creo que fue la mejor decisión que pude haber tomado.
¿Cómo fue tu experiencia como estudiante en la UACh? ¿Hubo algún profesor o ramo en particular que te marcó?
Mi experiencia en la UACh fue increíble, desde que llegué me recibieron con los brazos abiertos y desde ese mismo momento me di cuenta que la relación con mis profesores era distinta a la que estaba acostumbrada. Para mí nunca fue problema acercarme a hacer una pregunta o golpear alguna oficina a cualquier hora. Me olvidé de esa cultura del miedo a las preguntas tontas y a las interminables horas de espera para que tu profesor te atienda. En la UACh siempre me sentí cercana a todos mis profesores y eso me impulsó a querer ser una alumna exitosa.
En la Facultad también conocí a alguien que ha marcado mi vida en lo profesional y personal: el Dr. Gonzalo Paredes. Él me hizo creer en que yo podía lograr mis sueños si es que realmente los deseaba, sólo tenía que ser perseverante y trabajar duro por alcanzarlos. También me hizo crear confianza en mí y no tenerle miedo a los grandes desafíos. Le creí y hasta ahora he logrado cosas que jamás pensé que podría. Él me apoyó siempre, desde que me ofreció ser su ayudante, cuando necesité recomendaciones para una práctica profesional y así financiar mi primer viaje a EEUU. Cartas de recomendación para postular al Master y Doctorado e incluso ayuda para insertarme en Corvallis (Oregon) cuando llegué la primera vez. Eso sin contar sus clases, que siempre me hicieron ver el bosque desde una perspectiva distinta a la que conocía. Tuve la suerte de poder comunicarle cuanto agradecía sus consejos y que jamás olvidaré todo lo que hizo por mí.
Hoy, como ex alumna, con los desafíos que enfrenta en estos momentos la facultad ¿cómo la ves desde afuera?
La educación forestal está en crisis en el lugar en que se pregunte. Por ello, creo que hay un gran desafío para todas las Escuelas en que se imparte Ingeniería Forestal. Sin embargo, hay que pensar en que Chile es un país con muchos recursos forestales que forman buena parte de las economías regionales. El bosque es un recurso renovable que tiene buen crecimiento en Chile y hasta el momento la madera es irremplazable para muchas cosas que usamos en la vida cotidiana. Eso sin contar funciones tan vitales como la producción de agua y hábitat natural. Creo que la Facultad tiene que seguir adaptándose a los cambios que ha experimentado el sector forestal y a la vez manteniendo la base sólida que a mí me entregaron. Por ejemplo, el mismo tema de las energías renovables es muy interesante y necesitamos tener forestales que entiendan su potencialidad en el bosque.
Estudiaste un programa de Magíster y ahora un Doctorado en la Universidad Estatal de Oregon, ¿sentiste que llegaste a esta etapa con las herramientas necesarias?
Efectivamente, siento que inicialmente venía bien preparada en términos académicos. El mayor desafío para mí fue acostumbrarme al sistema Universitario trimestral y adaptarme a un bosque que tiene especies, edad de rotación, sistemas de cosecha y objetivos completamente distintos a los que hay en Chile. Para el Doctorado creo que el hecho de haber trabajado para la Empresa me dio mayor madurez profesional y personal. Fue una experiencia muy importante en términos de entender bien por qué y para qué hacemos investigación.
Tu tesis de doctorado está relacionada con la biomasa forestal ¿tiene esta área un amplio campo de desarrollo para un forestal?
El tema de la biomasa forestal ya lleva desarrollándose un buen tiempo tanto en Chile como EEUU. Sin embargo, la situación en cada país es distinta en cuanto a la diversidad de especies, manejo, estructura de propiedad y políticas de Estado. Creo que en nuestro país queda por hacer, sobre todo con el tema de las plantaciones dendroenergéticas para producción de chips y el potencial del raleo sanitario del bosque nativo en los lugares en que sea factible. Aquí en Oregon se estima que cerca de 1.72 millones de Ha de bosque tienen potencial para producir biomasa forestal a través de raleo sanitario. De utilizar ese potencial, mejora la salud del bosque, se reduce el riesgo de incendio, se contribuye con las metas de generación de energía renovable y se genera trabajo.
El principal objetivo del proyecto en el que yo estoy trabajando, es ver la potencialidad de producir combustible líquido para aviación, como parte del camino hacia una mayor independencia energética. Hace años, uno jamás se lo habría imaginado. La demanda por energía (total y renovable) seguirá creciendo no sólo en Chile. Sin embargo, hacer la biomasa forestal una fuente de energía tiene bastantes desafíos, por lo que creo se necesitaran más profesionales que tengan interés en esta área.
En este mismo ámbito ¿cómo se encuentra Chile en comparación con EEUU?
En Chile las grandes empresas forestales ya prácticamente autoabastecen 100% sus plantas utilizando residuos, ya sea industriales o directamente del bosque. Incluso venden electricidad al sistema interconectado central, creo que en ese sentido nuestro país está muy adelantado. El recurso está disponible y creo se puede obtener en forma sustentable, sin embargo, al ser éste un origen de energía más caro que los combustibles fósiles, es necesario tener políticas de Estado que lo promuevan de manera efectiva. Como decía anteriormente, el tema de las plantaciones dendroenergéticas puede ser una buena opción y entiendo eso ya ha sido estudiado en algunas entidades universitarias. También considero que se puede generar una buena oportunidad para mantener el bosque nativo saludable, junto con ello generar trabajo y ayudar a llegar a las metas de energía renovable que la ley estableció para el año 2020.
¿Qué les dirías a los futuros estudiantes de ingeniería forestal?
Les diría que no pierdan de vista el hecho de que el bosque es un recurso renovable, limpio y del cual dependen en algún grado 1.6 billones de personas en el mundo (FAO). Tenemos que ser capaces de encontrar un equilibrio en el cual podamos mantener bosques que sean sustentables en el tiempo, que sean capaces de producir bienes esenciales tales como agua y hábitat natural así como también bienestar económico a quienes viven de él. Creo que una de las claves para lograrlo es diversificar el manejo del bosque, y para ello necesitaremos profesionales que sean capaces de ver el bosque como un recurso que nos puede proveer de múltiples beneficios y no sólo de uno u otro.
¿Qué planes tienes al término de tus estudios de doctorado? ¿Volverás a Chile?
Aún estoy en el proceso de descubrir que es lo que quiero hacer luego del doctorado. De ello va a depender para dónde vaya o si me quedo. Siempre he planeado con mucha anticipación cuál es mi próximo paso, pero esta vez quiero tomarme la libertad de ver que hay disponible para mí cuando me gradúe. Eso junto con la experiencia de trabajar en Empresa y hacer clases me ayudara a tomar una mejor decisión. Si la vida además me da la opción de elegir más de un lugar, voy a preferir uno que este cerca del campo y las montañas. Así podre además hacer otras cosas que disfruto tanto como salir en bicicleta, esquiar, hacer trekking y ascender volcanes.