Se trata del Dr. Horacio Samaniego, académico de la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales de la UACh.
Entre septiembre y noviembre de 2025 el Dr. Horacio Samaniego Salinas, académico de la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales de la UACh, se encuentra realizando una estadía Alemania, gracias a una beca Fellowship en el Leibniz Institute of Ecological Urban and Regional Development de Dresden. Su estadía se enmarca en una incipiente colaboración con el Prof. Dr. Diego Rybski, que permitirá afianzar redes de investigación y docencia.
En este país, el Dr. Samaniego (https://www.ioer.de/en/career/ioer-fellowship/samaniego) quien es director del Instituto de Conservación, Biodiversidad y Territorio de la UACh, se encuentra trabajando en el grupo de Complejidad Urbana con el Dr. Rybski. Con este equipo profundizará aún más sus estudios de ciencias urbanas, complejidad, segregación y teoría ecológica, enfocado en la metáfora de la “ciudad como organismo” para abordar el problema del diseño de ciudades sostenibles y equitativas.
Espacios verdes
En este marco es que el académico de la UACh ha participado en diversas actividades. Una de ellas fue una charla en el IOER Forum, denominada “Assessing segregation and access to Public Green Spaces in Chile: Tools to plan more equitable urban spaces”, donde habló sobre el papel de los espacios verdes públicos en la planificación urbana equitativa.
“Un aspecto importante para fomentar ciudades sostenibles implica una consideración deliberada y explícita del bienestar social. Fundamental para lograr este objetivo es garantizar un acceso público sólido a las áreas verdes. Estos espacios, que van desde parques y jardines comunitarios hasta bosques urbanos y zonas ribereñas, ofrecen una multitud de beneficios que contribuyen directamente a la calidad de vida de los residentes urbanos”, afirmó el docente.
“Más allá de su atractivo estético, las áreas verdes proporcionan servicios ecológicos cruciales, como mejorar la calidad del aire, mitigar el efecto de isla de calor urbano y apoyar la biodiversidad. Desde una perspectiva social, sirven como lugares vitales para la recreación, la actividad física y la interacción social, promoviendo la salud tanto individual como comunitaria. El acceso a la naturaleza se ha relacionado con la reducción de los niveles de estrés, la mejora del bienestar mental y la optimización de la función cognitiva. Además, estos espacios públicos compartidos pueden fomentar un sentido de comunidad, alentando la cohesión social y brindando oportunidades para que personas de diversos orígenes se conecten”, continuó.
El Dr. Samaniego, resaltó que el acceso equitativo a los espacios verdes es primordial. “Las disparidades en el acceso a menudo reflejan las desigualdades socioeconómicas existentes, con barrios de bajos ingresos y comunidades minoritarias que con frecuencia tienen menos áreas verdes y de menor calidad. Comprender estas desigualdades ayudará a fomentar una planificación urbana proactiva e intervenciones políticas que hagan accesible la infraestructura verde en todas las partes de una ciudad”.
La charla del Dr. Samaniego se encuentra en YouTube en este enlace.
Beca
Cabe mencionar que esta beca es otorgada a destacados académicos internacionales y nacionales quienes tienen la oportunidad de impulsar su investigación en estrecha colaboración con el Instituto a través de la Beca IOER. Seleccionados mediante una convocatoria competitiva internacional, los becarios IOER reciben apoyo integral para desarrollar actividades de investigación innovadoras, interdisciplinarias y transdisciplinarias, estrechamente vinculadas al perfil científico del IOER.
Antecedentes sobre su investigación
“Mi investigación se centra en los sistemas urbanos como sistemas complejos adaptativos, examinando específicamente la relación entre el tamaño urbano y los resultados (outputs) de la ciudad. Estoy particularmente interesado en la macroecología de las ciudades y cómo la diversidad y la segregación evolucionan en ciudades más grandes y su impacto en la definición de la sostenibilidad”, explicó.
En relación con el uso de datos de telefonía móvil a los que ha recurrido en sus estudios recientes, el profesor indicó que “la integración ubicua de la tecnología de sensores móviles en nuestra vida diaria ha llevado a la generación de conjuntos de datos inmensos y en continuo crecimiento. Si bien estos conjuntos de datos han sido extensamente analizados y modelados, principalmente dentro de los sectores comerciales para la predicción del comportamiento y los patrones de gasto del consumidor, una oportunidad significativa permanece en gran medida sin explotar”.
Agregó que “ha habido una notable falta de esfuerzo concentrado en aprovechar el rico potencial de estos datos para obtener una comprensión más profunda de los fenómenos sociales complejos. Considerando que la tecnología de sensores móviles ya no es un dispositivo periférico sino un servicio fundamental, integrado y arraigado en el tejido de nuestra sociedad moderna, su naturaleza omnipresente ofrece una lente sin precedentes a través de la cual observar y analizar las interacciones humanas, el movimiento y las dinámicas comunitarias”.